y las ilusiones sobre mi cabeza.
¿Cómo callas? cuando todos hablan.
Tres corazones en una palma y el fuego en el alma.
Llega la lluvia y el viento,
me roban la calma.
Ellos caen en mi lágrima sagrada.
Tengo ganas de volver a creer, en la sinceridad de las palabras que se emanan de los labios de alguien más.
Tengo ganas de compartir mi individualidad, ésa la cual en otro tiempo entregaría por completo.
Tengo ganas de ver mi alma en los ojos de alguien más.
Tengo ganas de luchar, sin importar el cansancio.
Tengo ganas de respirar tan profundo, y compartir la calma.
Tengo ganas de correr y dar un abrazo tan fuerte, que dure más de una hora.
Tengo ganas de escribir esa carta que no termina, que simplemente las palabras fluyan sin contradicciones.
Tengo ganas de sentir toda la composición de sentimientos encontrados y perdidos.
Tengo ganas de mirar a lo lejos y encontrarme en un lugar, donde solo existe TÚ, YO, un nosotros y el tiempo necesario…
Ella estaba allí, con el frio que le calaba hasta el alma, con el deseo inaudito de un reencuentro y de que el tiempo se detuviese.
Caminaba con la misma prisa del viento, y él estaba allí, en la penumbra de lo desconocido.
Ella se acerco y las palabras se precipitaron a sus labios, el cuerpo temblaba y el alma también, el corazón parecía salirse de su lugar y las ganas de un beso no cesaban.
En él, la sorpresa invadió su rostro, ese rostro que se había extinguido en los recuerdos.
Salieron palabras entrecortadas de la extrañeza de la situación. Pero estaban allí; él, ella.
Reunidos cuando la distancia se había echo extensa. No hubo respuestas solo miradas, solo vagos recuerdos del pasado; sin explicaciones, sin cuestionamientos.
Ella esperaba y él miraba; miraba como ayer.
Sin prejuicios llego un beso, tan lento, tan anhelado, tan abrumador, tan necesario entre ambos.
Ella se perdió, olvido su pasado, su presente y su futuro.
Él se perdió, solamente en la confusión.
Desde esa noche su historia, solo fue un sueño…
Tengo la necesidad de escribir sobre dos personas que son de suma importancia en mi vida, que han estado en los mejores hasta los peores momentos de mi vida.
Hace unas horas discutíamos sobre cuantos años llevamos de amistad, Lilia decía que 7 años, Angie decía que 8 y en mi opinión no estaba segura si eran 7 u 8, no sé, solo se que desde el primer momento que comenzó esta amistad las abrace en mi corazón y no las he soltado hasta el momento, ni lo pienso hacer.
Fue una charla tan agradable, de esas charlas que tardan para darse, pero que se dan cuando menos lo esperas y dejan una sensación tan grata que quieres volver a repetir, y todo comenzó por mi gran curiosidad de saber cuales habían sido sus doce propósitos de año nuevo.
Así comenzó la platica, primero con los doce deseos, después de los tres mejores momentos del año, después los tres peores, seguido de los defectos de cada una, de las virtudes, hablando de los amores, de las familias, y de tantas cosas que a veces platicamos tan superficialmente, que hoy decidimos convertirlo en algo mas analítico.
Lo reconozco hoy descubrí que el color favorito de Angie es el verde (por cierto, extraño gusto jajaja); y de Lilia el azul (me trae viejos recuerdos ese color), y mientras lo decían me preguntaba como era posible que después de 7 años de amistad (llegamos a la conclusión haciendo la cuenta bien), yo no supiera eso. Me sentí mal, porque es algo tan simple y no lo sabia, hasta hoy, pero después de analizarlo un rato, me di cuenta de que sé mas cosas, que el simple color favorito.
De Lilia se que es una niña súper sensible, inteligente a mas no poder (bueno un poco matada); como se lo dije hoy admiro de ella su pasión y entrega por las cosas, porque siempre tiene esa garra para lograr lo que se propone. Reconociendo la verdad es sentimental al extremo, en palabras sabias de Angie, es demasiado aprensiva, y como ella misma lo dijo le falta “inteligencia emocional” (que bonito suena eso). Se también que es una niña a la que amo con todo mi corazón, por siempre estar ahí. Es callada y reservada, pero tiene la percepción más desarrollada que cualquier otra persona. Es una niña que conoce el verdadero significa de una amistad; no esas amistades superficiales; si no una amistad que me ha brindado todo este tiempo, y que estoy segura que perdurara por 7 años mas, y otros 7, y otros 7, y otros 7…
De Angie; mi de agurro tantas cosas que puedo decir de ti. Persona mas franca como tú, jamás había conocido. Esa capacidad que tienes de manejar las cosas y de razonarlas la admiro de sobre manera porque como alguna vez te lo dije tú eres mi parte razonable y yo de ti soy tu parte sentimental (porque sí lectores, soy una sentimental, bueno ya lo habrán notado). Te amo con todo mi corazón, y eres una persona por la que daría mi vida, por verla feliz. Eres tan luchadora que no importa obstáculo, siempre lo pasas para salir adelante ante cualquier situación. Siempre que he perdido los pies del suelo, tu estas ahí para plantarme de nuevo en la realidad. Tantas risas que hemos compartido y tantas lagrimas que si las cuento no termino, pero siempre has estado y se que seguirás. También conoces el significado de la amistad como nadie más lo conocerá, ese significado que me entregas y que lo recibo con los brazos abiertos, hasta mi último respiro.
Tal vez no sabía sus colores favoritos y me disculpo por eso. Pero se que las amo con todas mis fuerzas y que siempre están en mi corazón.
Gracias por los mil y un momentos vividos, y gracias por anticipado por todos los que faltan.
Sin más que decir…
Las amo y solo quiero verlas felices…
P.D. Queda pendiente otra charla como la de hoy.
Hoy la persona, que dice conocerme mejor que nadie, he incluso mejor de lo que yo me conozco, me dijo que vivo mi presente mirando las cosas detrás mi reflejo, pero con reservas.
Yo opine que no es así, porque ahora puedo seguir, porque ahora estoy bien, porque ahora pude dejar las cosas en la calma de mí ser.
Pero no puedo engañar, las palabras quedaron danzando en mi cabeza, en el alma, en mi ser; “REFLEJO, RESERVAS”, que palabras tan complejas.
Bien dicen que “Cada quien ve las cosas como le conviene”, y si es absolutamente verdadero; y no lo niego, a mi me convence la manera en como veo mi vida ahora.
Estoy, tranquila a la espera de una llegada.
Estoy, sin involucrarme.
Estoy, con una promesa en el aire.
Estoy, sonriendo con la sinceridad que sale.
Estoy, dispuesta a seguir.
Estoy, aferrándome a la vida.
Con reservas o en mi reflejo tal vez, pero estoy…